El Gobierno se vincula al primer debate sobre los supuestos de 2024 en el Parlament sin que el alcalde sea necesario para aprobarlos. Esquerra considera vital un proyecto de ley que supone 2.440 millones más que los actuales y por lo que Salgán Adelante ha decidido jugar con dos cartas: con la primera vez que los republicanos quieren explorar conversaciones sobre Hard Rock siempre y cuando no impliquen frenar su parcela y su plan de desarrollo urbano (PDU); el segundo se juega en Madrid, con la vicepresidenta y líder de Sumar, Yolanda Díaz, al otro lado de la cinta, para reunirse en los ayuntamientos.
«Podemos encontrarnos con la gente, pero no es el PDU», ha declarado esta mañana el viceconseller, Sergi Sabrià, en una entrevista en TV3. Sabrià dejó claro, sin embargo, que el proyecto lúdico plantado en Vila-seca y Salou no tiene frenos. Sin embargo, no se especificó la fórmula para estudiar el gobierno. «Sabremos qué se puede hacer», dijo en paralelo la vicepresidenta Laura Vilagrà, preguntándose por este equipo.
El proyecto catalán busca una vía intermedia para salvar las condiciones sin influir en la transformación del proyecto lúdico
El ejecutivo catalán y los de Jéssica Albiach se reunieron esta mañana sin avances. Los ayuntamientos insisten en que no es posible facilitar los presupuestos de la Generalitat de 2024 si no se retira el PDU. Pero el gobierno advierte que hacerlo se expandirá a una compensación financiera por valor de millones por responsabilidad patrimonial. Así, el Gabinete de Pere Aragonès pretende ofrecer una solución intermedia que pueda convencer a los ayuntamientos.
Por otro lado, existe la opción de contactar con Díaz. ERC ya se ha comunicado con el líder de Sumar para negociar con En Comú Podem. De momento en momento éxito. Pero que ERC alcance los presupuestos generales del Estado y decaigan como consecuencia del no de los ayuntamientos a las cuentas catalanas es una posibilidad que los republicanos no descartan.
En el camino para enfrentarse a este medio, la vicesecretaria general y portavoz de Esquerra, Marta Vilalta, evitó en tres ocasiones aprovechar concretamente la conveniencia de llamar a Díaz. «Siempre mantenemos conversaciones con todo el mundo», es la fórmula que utilizó como respuesta.
«Cada uno es responsable de sus actos», ha remarcado Vilalta, al tiempo que ha afirmado que las negociaciones con los ayuntamientos siguen abiertas para intentar llegar a «un punto de encuentro». «En este momento apelamos a la responsabilidad de los grupos. Creemos que preferimos desgastar al Govern o queremos ayudar al país; si queremos mantener las cuentas de CiU o apoyar unos buenos presupuestos», concluyó el portavoz.
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